Cannoli de pasta filo con pistacho

/5

PRESENTACIÓN

Hay masas tan delicadas y trabajadas con arte que parecen una verdadera magia, como la pasta filo (phyllo en griego). Muchas hojas de masa finísima que unidas juntas y cocidas crean un hojaldre multicapa, ligero y crujiente. La pasta filo, realizada con harina, agua y aceite, tiene orígenes de Medio Oriente y se utiliza para dulces típicos como el baklava, pero es perfecta también para realizar otras preparaciones dulces, como por ejemplo unos Canutillos de pasta filo con merengue de frutos rojos, o para tartas rústicas saladas. En esta receta os proponemos realizar unos cannoli de pasta filo con pistacho, una reinterpretación de los clásicos Cannoli siciliani que os sorprenderá por su cáscara crujiente y un relleno suave de ricotta de oveja y pasta de pistacho. Esta última es una crema fluida, no dulce, que podréis encontrar en tiendas de repostería o tiendas ecológicas. Para preparar la receta, comenzad trabajando la ricotta, ¡para degustar unos irresistibles cannoli de pasta filo con pistacho!

Descubrid otras deliciosas variantes del típico dulce siciliano:

 

INGREDIENTES

Ingredientes para aproximadamente 35 cannoli
Ricotta de oveja 750 g
Pasta de pistachos 100 g
Pasta filo 240 g
Gotas de chocolate 80 g
Azúcar glas 350 g
Para pincelar y sellar
Claras de huevo 1
Mantequilla 70 g
Para decorar
Granillo de pistachos cantidad suficiente

Preparación

Para preparar los cannoli de pasta filo con pistacho comenzad con el relleno: tamizad la ricotta, que habréis tenido cuidado de escurrir del suero toda la noche en el frigorífico, con un colador de malla fina 1. Repetid la operación al menos dos veces para hacer la ricotta más cremosa y lisa (si la ricotta queda demasiado dura, podéis diluirla con un poco de leche fresca o nata) luego añadid el azúcar glas (podéis también utilizar azúcar normal) 2 y mezclad los ingredientes. Luego, verted también la pasta de pistacho 3.

Mezclad bien los ingredientes 4 y colocad la crema en el frigorífico durante al menos 30 minutos cubierta con film en contacto (si queréis que tome más sabor podéis prepararla la noche anterior y dejarla reposar toda la noche en el frigorífico. Las gotas de chocolate se añadirán solo al momento de rellenar los cannoli). Mientras tanto, dedicad vuestro tiempo a la preparación de los cannoli: primero derretid la mantequilla, luego tomad una hoja de pasta filo; podéis dividirla por la mitad con un cortador de pasta para superponer más fácilmente las capas 5. Pincelad una capa con la mantequilla derretida 6,

luego superponed otra hoja 7: pincelad también la segunda hoja 8 y colocad una tercera. Mientras realizáis estas operaciones, tened cuidado de cubrir las demás hojas de pasta filo no pinceladas con film transparente, para que no se sequen demasiado al contacto con el aire. Con un cortador de pasta con rueda lisa sacad cuadrados de aproximadamente 5 cm por lado 9.

Enrollad cada cuadrado alrededor de un tubito, comenzando por una de las esquinas y fijad los extremos pincelándolos con una clara de huevo ligeramente batida (10-11) (tened cuidado de no pincelar también el tubito, de lo contrario no podréis desmoldar los cannoli después de la cocción). Luego colocad los cannoli en una bandeja forrada con papel de horno 12 y horneadlos en horno estático precalentado a 200° durante aproximadamente 8-10 minutos (180° durante 5-6 minutos si es ventilado): la pasta filo se cocina muy rápidamente.

Una vez dorados, sacadlos del horno y dejad que se enfríen completamente, luego retirad muy delicadamente los tubitos 13. Sacad la crema del frigorífico y tamizadla al menos un par de veces para hacerla más lisa y sedosa 14. Verted las gotas de chocolate y mezcladlas con el relleno usando una espátula 15.

Llenad con la crema una manga pastelera sin boquilla o con boquilla lisa y rellenad cada cannoli 16. Como toque final, podéis pasar un extremo de los cannoli de pasta filo por granillo de pistacho 17 (o de avellanas o almendras si preferís). ¡Servid los cannoli de pasta filo con pistacho recién rellenos 18!

Conservación

Conservad las cáscaras de los cannoli de pasta filo bajo una campana de vidrio o en una bolsa de congelación; se pueden congelar. Podéis conservar la crema en el frigorífico cubierta con film transparente en contacto durante 1-2 días: de este modo podréis componer los cannoli cuando se necesite preservando la crocancia de la cáscara y la frescura del relleno.

Consejo

¡Recordad añadir las gotas de chocolate al final, poco antes de rellenar los cannoli! Si lo preferís, para el relleno también podéis usar ricotta de vaca o, para un sabor aún más delicado, ricotta de búfala. Si sois amantes de la tradición, también podéis omitir la pasta de pistacho y condimentar la crema de ricotta con gotas de chocolate, frutas confitadas o frutos secos!

Curiosidad

La pasta phyllo está compuesta de capas muy finas de masa, a base de agua y harina. Phyllo en griego significa justamente "hoja" y evoca los finos velos de hojaldre que la componen. Hacerla en casa requiere mucha paciencia y gran destreza manual. Por comodidad, se puede comprar ya lista, fresca o congelada.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.