Croquetas de carne cocida (bitterballen)

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PRESENTACIÓN

Las croquetas de carne cocida (bitterballen) son una famosa receta holandesa y uno de los aperitivos más deliciosos del mundo. El sabor sabroso e irresistible de estas pequeñas albóndigas se debe al relleno de carne de res cocida y a una salsa obtenida con el mismo caldo de carne.
Para hacer que las bitterballen sean suaves y se derritan en la boca, el secreto es dejar "marinar" la carne en la salsa durante toda la noche, porque cuanto más repose la mezcla más maleable será. En Holanda, las bitterballen se preparan en casa o se ofrecen en los locales como aperitivo junto a bebidas alcohólicas (bitter), de donde derivaría el nombre. Según la tradición, el relleno está hecho con carne de res, pero también las puedes preparar con pollo o champiñones, por ejemplo.

INGREDIENTES

Ingredientes para 30 croquetas
Costillar de ternera 500 g
Agua 1 ½ l
Sal fina cantidad suficiente
Para el condimento
Caldo de carne 600 ml
Harina 00 150 g
Mantequilla 100 g
Cebollas blancas 30 g
Perejil 1 manojo
Nuez moscada cantidad suficiente - para rallar
Sal fina cantidad suficiente
Pimienta negra cantidad suficiente
Para el empanado y la fritura
Huevos 3
Harina 00 150 g
Pan rallado 150 g
Aceite de cacahuete 800 ml

Preparación

Para realizar las croquetas de carne cocida (bitterballen) empieza a preparar la carne: pon a hervir la carne de res en 1,5 l de agua 1, sala 2 y deja cocinar a fuego medio hasta que la carne se haya ablandado: tomará al menos 1 hora. De vez en cuando quita con una espumadera las impurezas que se formen en la superficie. Cuando la carne esté cocida, escúrrela y déjala enfriar 3, mientras reservas el caldo.

Mientras la carne se cocina, prepara la salsa: pica el manojo de perejil 4, limpia y pica finamente la cebolla 5 y vierte en una cacerola grande la mantequilla 6.

Déjala derretir a fuego lento, luego vierte la harina poco a poco mientras mezclas con una varilla 7, debes crear el roux y dar un color dorado a la mezcla de harina y mantequilla, teniendo cuidado de no quemarla. Una vez obtenido el roux, vierte el caldo de carne 8 y sigue mezclando; condimenta con sal y pimienta al gusto. Cocina a fuego lento unos minutos, luego añade la cebolla 9

y el perejil picado 10. Cocina unos minutos más para que espese; después desmenuza la carne con las manos para reducirla a trocitos 11 y añádela a la bechamel 12,

mezcla 13 y apaga el fuego. Transfiere la mezcla a un bol grande, ralla la nuez moscada 14 y cúbrela con papel film 15: debe descansar en el frigorífico de 3 a 4 horas, mejor si es toda la noche.

Pasado el tiempo necesario, puedes retomar la mezcla y modelarla tomando aproximadamente una cucharada a la vez 16 para crear 30 albóndigas de forma esférica. Pásalas por harina 17, por huevo batido 18.

y por pan rallado 19. Conforme las realices, colócalas en una bandeja forrada con papel de horno 20 y ponlas en el frigorífico cubiertas con film para que se endurezcan al menos 30 minutos; luego fríelas en pequeñas cantidades en aceite de semillas caliente (puedes usar aceite de cacahuete), calentado a una temperatura de 190° que debes mantener, controlando con un termómetro de cocina 21.

Cuando estén bien doradas, escúrrelas 22 y colócalas en una bandeja forrada con papel absorbente para escurrir 23. ¡Tus croquetas de carne cocida están listas para disfrutarse calientes 24!

Conservación

Puedes conservar la mezcla cruda durante 2 días en el frigorífico cubierta con film transparente. Una vez fritas, se conservan en el frigorífico durante 1-2 días y se pueden recalentar cuando sea necesario.
Se desaconseja congelar las croquetas para evitar perder su consistencia suave y derretible.

Consejo

¡Las croquetas de carne cocida también se pueden preparar con carne de ternera o pollo!

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.