Crescentine o tigelle

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PRESENTACIÓN

Las crescentine (de "masa que crece"), comúnmente conocidas como tigelle, son unas focaccias típicas de Módena preparadas con una masa a base de harina, manteca de cerdo, levadura y agua. En el pasado, las crescentine se cocían en discos especiales de terracota o piedra refractaria llamados "tigelle", de donde proviene el nombre por el cual se conoce actualmente este típico pan emiliano. De aquí también deriva el nombre de la sartén especial que se usa hoy para cocinarlas, la tigelliera, una especie de molde que se calienta directamente sobre el fogón y que deja en la superficie de las tigelle el clásico diseño floral, una rosa celta para ser precisos. Una vez listas y bien doradas, las crescentine pueden rellenarse con la típica cunza modenesa, un picadillo de manteca de cerdo, romero y ajo, o pueden servirse con verduras, embutidos y quesos al gusto, como por ejemplo jamón crudo y crescenza. ¡La elección es vuestra!

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INGREDIENTES
Para unas 22 crescentine
Harina 00 500 g
Harina 0 250 g
Leche entera 300 g
Agua 150 g
Manteca de cerdo 50 g
Aceite de oliva virgen extra 50 g
Levadura fresca de cerveza 10 g
Sal fina 20 g

Preparación

Para preparar las crescentine (o tigelle) poned la harina 0 1 y la harina 00 en el bol de la batidora 2, luego añadid la levadura fresca 3.

Añadid la leche 4 y la manteca de cerdo 5, luego encended la batidora equipada con gancho a baja velocidad 6.

Una vez que los primeros ingredientes se hayan incorporado, aumentad ligeramente la velocidad de la batidora y añadid el agua poco a poco 7. En este punto añadid también la sal 8 y continuad vertiendo el agua en hilo 9, asegurándoos de que se incorpore bien a la masa.

Después de unos 10 minutos, la masa estará uniforme, así que también podéis verter en hilo el aceite 10. Dejad trabajar la batidora durante otros 5 minutos. Si todavía resulta pegajosa, detened la máquina y dejad reposar la masa cubierta durante 5 minutos. Cuando la masa esté lisa y ligada 11 dejadla fermentar a temperatura ambiente durante 3 horas o hasta que duplique su volumen en un bol cubierto con film transparente 12.

Pasado el tiempo de fermentación, enharinad ligeramente tanto la tabla de amasar 13 como la masa 14 y comenzad a extenderla con la ayuda de un rodillo 15. Si se retrae mucho al extenderla, esperad unos minutos para permitir que la masa se relaje.

Una vez obtenido un grosor de medio centímetro 16, recortad discos con la ayuda de un cortapastas de 9 cm de diámetro 17. Colocad las tigelle en una bandeja y dejadlas reposar durante 20 minutos sobre papel de horno cubiertas con film transparente. Los recortes de masa se pueden reamasar brevemente para sacar más tigelle 18

Estáis listos para la cocción: calentad vuestra tigelliera, colocad los discos en los compartimentos y coced durante 5 minutos por cada lado 19. Una vez que las tigelle estén doradas y presenten el típico diseño floral 20, transferidlas a una bandeja forrada con un paño 21 y cubridlas con el mismo: de esta manera quedarán blandas por dentro y crujientes por fuera. Vuestras tigelle están listas, solo queda disfrutarlas solas o rellenas.

Conservación

Se recomienda consumir las crescentine (o tigelle) en el momento, bien calientes. Se pueden conservar en el frigorífico cubiertas con film transparente durante un máximo de un día.

Las tigelle no rellenas se pueden conservar como máximo un día en el frigorífico, bien cubiertas; calentadlas en una sartén durante un minuto por cada lado antes de servirlas. Alternativamente, podéis congelarlas después de dejarlas enfriar; al momento de servirlas, calentadlas en un horno estático precalentado a 150° durante 10-15 minutos (o en horno ventilado a 130° durante 8-10 minutos) y luego rellenadlas.

Consejo

La manteca de cerdo se puede sustituir por la misma cantidad de aceite de semillas.

Si lo deseáis, podéis sazonar la masa con hierbas aromáticas como por ejemplo romero fresco picado.

Tened cuidado de no cocer las crescentine a una temperatura demasiado alta, de lo contrario se quemarán por fuera y quedarán crudas por dentro.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.