Yorkshire pudding

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PRESENTACIÓN

Muchos habrán oído hablar de él, pero su nombre aún puede ser engañoso, tanto por la difícil pronunciación como por su significado: el pudding de Yorkshire no es un postre como se podría pensar, sino un acompañamiento tradicional de la cocina anglosajona, típicamente combinado con suculentos segundos platos de carne como roast-beef o asados. Similar a un soufflé, se realiza con una simple masa a base de leche, huevos y harina, pero el secreto de su forma reside en la cocción: es muy importante que tanto la bandeja como el aceite en la base estén muy calientes antes de añadir la masa, para que esta se infle creando una cavidad central, perfecta para acoger y absorber sabrosas salsas como la famosa brown gravy (similar a nuestro fondo oscuro). Un acompañamiento que sin duda se diferencia de nuestro imaginario, pero que vale la pena probar... ¡así descubriréis por qué el pudding de Yorkshire se ha convertido en una verdadera institución británica!

INGREDIENTES
Ingredientes para 12 tartaletas
Leche entera 200 g
Harina 00 200 g
Aceite de semillas 140 g
Huevos 240 g - (aproximadamente 4)
Sal fina cantidad suficiente
Pimienta negra cantidad suficiente

Preparación

Para preparar el pudding de Yorkshire, tomad una bandeja de muffins antiadherente y verted el aceite de semillas en su interior distribuyéndolo equitativamente entre los compartimientos 1. Insertad la bandeja en el horno estático precalentado a 200° y calentad el aceite durante unos 15 minutos. Mientras tanto, unid los huevos y la leche en un bol 2, añadid sal 3 y pimienta

y mezclad con una varilla manual 4, luego incorporad también la harina 5 y mezclad nuevamente hasta obtener una masa lisa y homogénea 6.

Pasados los 15 minutos, retirad la bandeja del horno teniendo mucho cuidado de no quemaros con el aceite caliente y verted la masa en los compartimientos hasta la mitad de su altura 7. La masa comenzará a cocinarse, así que volved a insertar inmediatamente la bandeja en el horno y continuad la cocción durante unos 30 minutos, sin abrir el horno. Una vez cocidos, los pasteles estarán bien inflados 8 y luego tenderán a desinflarse hasta asumir su característica forma irregular 9: dejad enfriar ligeramente antes de desmoldar y servir vuestro pudding de Yorkshire.

Conservación

El pudding de Yorkshire se puede conservar en el frigorífico durante un máximo de 1-2 días. Alternativamente, podéis congelar los pasteles cocidos después de haberlos dejado enfriar completamente.

Consejo

Si lo deseáis, podéis saborizar la masa añadiendo queso parmesano rallado y hierbas aromáticas picadas.

Curiosidad

El pudding de Yorkshire es una receta que se remonta al menos al 1700: originalmente se llamaba "dripping pudding" porque la bandeja se colocaba debajo del asador de la carne para recoger los jugos que goteaban de ella. Con este método no solo se evitaba desperdiciar comida, sino que también se hacía la comida más sustanciosa en una época en la que la carne tenía un costo muy alto.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.