Crumble de cerezas

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PRESENTACIÓN

El crumble es una preparación deliciosa y fácil de realizar, esta delicia está muy difundida en Inglaterra e Irlanda tanto en la versión salada como en la dulce, como la receta que te proponemos aquí: crumble de cerezas, un postre veraniego que resalta al máximo todo el sabor de estos frutos de temporada. El típico crumble se realiza con una base cremosa de fruta cocida cubierta por una capa crujiente y "desmenuzada", el crumble propiamente dicho. Una vez descubras esta preparación no podrás prescindir de ella, es tan versátil que será difícil resistir la tentación de probar su variante salada como crumble de verduras, o el más famoso y tradicional crumble de manzana. Estamos seguros de que el crumble de cerezas te conquistará al primer bocado: una masa desmenuzada, rica y friable que con su sabor dulce envuelve suaves y jugosas cerezas. ¿Estás listo para hundir la cuchara en esta delicia?

INGREDIENTES

Para 4 moldes de 8 cm de diámetro y 5 de altura
Cerezas 500 g
Azúcar 50 g -
Ralladura de limón 1 -
para la masa desmenuzada
Harina 00 100 g
Vaina de vainilla 1
Azúcar moreno 60 g
Canela en polvo 2 g -
Mantequilla 50 g - a temperatura ambiente

Preparación

Para preparar el crumble de cerezas comienza por el relleno. Enjuaga las cerezas bajo agua corriente, luego sécalas con un paño limpio y deshuésalas con el deshuesador 1. Colócalas en un bol y añade el azúcar 2 y la ralladura de un limón 3. Asegúrate de obtener solo la parte amarilla de la cáscara, evitando rallar también la parte blanca que es más amarga.

Mezcla con una espátula para uniformar los ingredientes 4 y deja reposar durante al menos 30 minutos a temperatura ambiente 5 removiéndolas de vez en cuando con una cuchara. Mientras tanto prepara la masa para el crumble. Incide la vaina de vainilla realizando un corte a lo largo de la vaina y raspa las semillas internas ayudándote con un cuchillo de hoja lisa 6. Reserva las semillas de la vaina de vainilla.

Ahora toma un bol grande y añade la harina 7 y el azúcar moreno 8, la canela en polvo 9

y las semillas de la vaina de vainilla 10, finalmente añade la mantequilla ablandada a temperatura ambiente 11. Comienza a trabajar los ingredientes rápidamente con las yemas de los dedos de manera que obtengas una mezcla granulosa y desmenuzada 12, procurando que la mantequilla entre en contacto con los ingredientes secos.

Debes obtener una mezcla bien desmenuzada pero no arenosa (de aquí deriva el nombre crumble que significa "miga"). Reserva la mezcla 13. Luego toma 4 moldes para horno de 8 cm de diámetro y 5 cm de altura. Vierte algunas cucharadas de cerezas dentro de cada molde 14 y nivela las frutas 15 dentro del molde.

Cubre cada molde con el crumble previamente obtenido hasta el borde del molde 16. Coloca los moldes en una bandeja y hornea en horno estático precalentado a 180°C durante 30 minutos 17. Debes obtener una superficie dorada y crujiente de los crumbles: en este punto estarán listos. Sácalos del horno aún calientes 18. Sirve tu crumble de cerezas aún caliente directamente en el molde.

Conservación

El crumble de cerezas se puede conservar durante un máximo de 4 días fuera del frigorífico cubierto con papel film o bajo campana de vidrio. Si es necesario, caliéntalo ligeramente y sírvelo. También puedes congelarlo solo si has utilizado ingredientes frescos y no descongelados.

Consejo

La canela sirve para dar un sabor más intenso al crumble de cerezas, pero si no te gusta puedes omitirla: ¡el crumble será igualmente delicioso! Lo importante es servir el crumble aún caliente, mejor si está acompañado de helado de vainilla o, para los más golosos, con nata. Para preparar los crumbles algunos prefieren usar un procesador de alimentos, utilizando mantequilla fría de frigorífico (ya que al accionar las cuchillas calienta todos los ingredientes): los ingredientes para el crumble deben mezclarse unos pocos segundos para obtener una mezcla muy granulosa.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.