Tarta de queso con chocolate blanco y frambuesas
- Fácil
- 35 min
- Kcal 879
La tarta de queso fresco es una especialidad de Alsacia-Lorena, región francesa en la frontera con Alemania y Bélgica, preparada con un queso fresco particular, el fromage blanc, rico en calcio y proteínas.
La tarta tiene una base de pasta de hojaldre y un relleno suave a base de fromage blanc, huevos, azúcar, vainilla y cáscara de limón rallada, que le aporta a la preparación aroma y frescura.
Una vez en el horno, vuestra tarta crecerá y se dorará en la superficie, luego, durante el enfriamiento, se compactará pero mantendrá una textura esponjosa y ligera.
La tarta de queso fresco es un postre simple y rápido de preparar, ¡excelente para disfrutar en la merienda aún tibia!
Para preparar la tarta de queso fresco, tomad un molde de cerámica (o antiadherente) de 24 cm de diámetro y forradlo con papel de horno que cortaréis en un círculo de 30 cm de diámetro, lo mojaréis y escurriréis bien. Secad el papel tamponándolo con un paño limpio y seco, luego colocadlo dentro del molde para que se adhiera bien. Colocad en el molde la masa de hojaldre 1 y forrad el molde, haciendo que el hojaldre se adhiera a los lados 2. Pinchad el fondo con un tenedor 3 y poned todo en el frigorífico.
Pasad al relleno: en un bol grande colocad el fromage blanc 4, las yemas de huevo 5, la cáscara rallada de un limón no tratado 6.
Cortad por la mitad la vaina de vainilla y rascad las semillas con la punta de un cuchillo 7, luego añadidlas a los demás ingredientes 8. Finalmente, añadid en el bol la maicena, la sal y la nata 9.
Mezclad todo con las varillas de una batidora eléctrica o planetaria hasta obtener una mezcla lisa y cremosa 10. Aparte, montad las claras con el azúcar (11-12):
las claras deben quedar brillantes, es decir, no a punto de nieve firme sino aún suaves y cremosas 13. Incorporadlas delicadamente a la mezcla con el fromage blanc 14, mezclando de abajo hacia arriba 15.
Verted todo en la base de masa de hojaldre, llenando el molde hasta 3/4 de su altura (16-17) y cocinad la tarta de queso fresco en horno estático durante aproximadamente 1 hora a 180°, hasta que la superficie de la tarta esté bien dorada 18. Extraed la tarta del horno y dejadla enfriar sobre una rejilla: ¡vuestra tarta de queso fresco puede servirse tibia o fría!