Cómo limpiar y abrir los mejillones
- Fácil
 - 25 min
 
				Apulia es famosa por sus hermosas playas y por el pescado siempre fresquísimo que cada mañana llega a los muelles de pequeñas y grandes localidades junto con Mejillones a la marinera, erizos y muchos otros mariscos. Aunque en los restaurantes a menudo se prefiera el pescado crudo, los mejillones fritos son un entrante de la tradición marinera que no puede faltar en el menú. La mayoría de las recetas a base de mejillones suelen prever la apertura del fruto solo en cocción, como en el caso de la Mejillones a la pimienta, mientras que para realizar los mejillones fritos será necesario primero abrirlos, luego rellenarlos y finalmente freírlos... solo de esta manera quedarán tiernos y liberarán todo su espléndido sabor. Los mejillones fritos son perfectos para servir como entrante todavía calientes, pero serán deliciosos también a temperatura ambiente y podrán usarse para montar un buffet al estilo 100% pugliese!
¡No te pierdas también estas especialidades de la cocina pugliesa:
										Para preparar los mejillones fritos, lo primero que hay que hacer es limpiar los mejillones. Una vez limpiada la concha con un estropajo y eliminada la barba interna 1, deberás abrirlos en crudo. Para hacerlo, bastará con mantener firme el mejillón con la mano izquierda y deslizar la hoja de un cuchillo entre las dos conchas empujando hacia afuera 2. Luego, abre las dos valvas, dejándolas unidas 3.
										Coloca los mejillones abiertos dentro de un colador que habrás colocado sobre un bol y procede con la apertura de los demás mejillones 4. Ahora ocupaos del relleno: desplaza el colador con los mejillones conservando el agua que han soltado 5, luego añade el pan desmenuzándolo groseramente 6.
										Amasa todo con las manos 7, luego añade el Parmesano 8 y el perejil finamente picado 9.
										Añade también unos 40 g de pan rallado 10 y los huevos 11. Mezcla todo hasta obtener un compuesto uniforme 12.
										Ajusta de sal 13 y pimienta. En este punto será necesario ajustar el compuesto añadiendo más pan rallado según la cantidad de agua liberada por los mejillones hasta obtener una consistencia seca y compacta. Coloca los mejillones en una bandeja y rellénalos con aproximadamente 1 cucharadita del compuesto recién preparado 14 15, luego presiona el compuesto y cierra ligeramente las valvas.
										Tan pronto como hayas rellenado todos los mejillones 16, calienta el aceite hasta alcanzar la temperatura de 170° y cuando esté caliente, sumérgelos en pequeñas cantidades ayudándote con la espumadera 17. Presta mucha atención porque en esta fase el aceite podría salpicar. Cuando estén bien dorados, tardará 3-4 minutos, escúrrelos 18.
										Transfiere los mejillones a un papel de cocina 19 y continúa friendo todos los demás 20. ¡Sirve tus mejillones fritos aún calientes 21!