Pechuga de pollo al horno
- Fácil
- 50 min
- Kcal 216
La pechuga de pollo al vinagre balsámico es un segundo plato sencillo y una buena alternativa para dar más sabor a la carne!
Con la marinada, la pechuga de pollo adquiere suavidad y sabor gracias a la adición de vinagre balsámico, laurel, romero y un amaro aromático de hierbas al limón. Bastarán unos pocos minutos en la sartén para que la carne quede jugosa, dorada por fuera y tierna por dentro. Para hacer aún más sabroso este segundo plato, puedes añadir una salsa o una reducción de vinagre balsámico.
Puedes acompañar la pechuga de pollo al vinagre balsámico con verduras de temporada o con patatas nuevas al horno!
Para preparar la pechuga de pollo al vinagre balsámico, comienza con la marinada: en un bol coloca el aceite de oliva 1, exprime el jugo de medio limón, cuélalo con un colador de malla fina y añádelo al aceite en el bol 2. Luego emulsiona bien los ingredientes con una batidora de mano o un tenedor. Añade las hierbas: las ramas de romero, el tomillo 3
y las hojas de laurel 4. Luego vierte el vinagre balsámico 5, el amaro 6 y emulsiona bien.
Pasa ahora a preparar la carne: toma la pechuga y quítale los filamentos de grasa (si los hay), luego con un cuchillo afilado comienza a cortarla 7 para obtener rebanadas de aproximadamente 1 cm de grosor 8. Coloca las rebanadas de pechuga de pollo en el bol de la marinada 9
y humedécelas bien. Da la vuelta a las rebanadas para marinarlas también por el otro lado 10, luego cúbrelas con papel film 11 y colócalas en el frigorífico por al menos una hora. Pasado el tiempo necesario, toma una sartén grande y vierte un poco de aceite. Dora un diente de ajo 12 y retíralo cuando esté dorado.
Coloca las rebanadas de pollo en la sartén 13 y dóralas bien. Luego dales la vuelta 14 y continúa la cocción por el otro lado 15. ¡Sirve las rebanadas de pollo aún calientes!