Granizado de sandía, fresitas del bosque y vodka
- Muy fácil
- 40 min
- Kcal 159
Roja, jugosísima, dulce y perfumada es la sandía la verdadera y única reina del verano. Cortada en rodajas para llevar a la playa o a la montaña, comida con cuchara en Granizado de sandía, fresitas del bosque y vodka o bebida en forma de Caipiroska de sandía e incluso en Ensalada de sandía, es ella la que siempre gana. Sin embargo, ya lo saben, del melón hay una parte considerable que regularmente se descarta: la cáscara. Una de nuestras chefs en la cocina ha pensado en proponer una receta de su tierra de origen, Albania: la sandía confitada (Gliko shalqini), realizada precisamente con la cáscara de la sandía. La sandía confitada se realiza en pequeños bocados y en Albania es habitual ofrecerlos como regalo dulce a amigos o parientes que pasen por casa, para un café o para un saludo. No es necesario una ocasión especial, de hecho, para estar feliz de la visita de alguien y para agradecerle el tiempo que nos ha dedicado. Además, ¿cuál mejor manera, además de la Confitura de sandía, para capturar todo el sabor veraniego de la sandía y conservarlo en la despensa durante todo el año?
Para preparar la sandía confitada comienza por la cáscara que debe estar bien limpia de la pulpa roja y luego se corta en tiras 1. Después pela la cáscara, eliminando la parte más oscura, utilizando un pelador 2. Corta en cubos de aproximadamente 1 cm y ahora deberás repetir esta operación tres veces para que la cáscara tenga la consistencia adecuada 3.
Llena una olla con agua fría y sumerge los cubos 4. Tan pronto como llegue a ebullición, cocínalos durante 10 minutos 5 y luego escúrrelos 6
y repite dos veces más 7. A la tercera y última vez, escurre los cubos vertiéndolos en un bol 8 y luego cubre con abundante agua fría 9.
Debes dejar los cubos en remojo durante 24 horas teniendo cuidado de cambiar el agua 10 7-8 veces durante el día 11. En este punto pesa los cubos y recuerda que por cada kg de cáscara hervida se necesita igual peso de azúcar. En nuestro caso obtuvimos 500 g de cubos, por lo tanto, en la olla hemos vertido 500 g de azúcar. El agua, en cambio, debe cubrir ligeramente el azúcar, por lo que asegúrate de la olla antes de proceder. En nuestro caso han sido necesarios 200 g de agua 12.
Enciende el fuego y deja que la mezcla alcance una consistencia viscosa similar a la de la miel; aproximadamente se necesitan 20/25 minutos. Exprime el limón y filtra el jugo 13, en la cacerola con el jarabe vierte la vaina de vainilla dividida 14 y luego el jugo filtrado 15.
También sumerge los cubos de cáscara 16 y déjalos cocinar durante unos 50 minutos a fuego muy bajo y removiendo de vez en cuando 17. Una vez confitados, apaga el fuego, elimina la espuma en la superficie utilizando una espumadera y luego cubre con la tapa 18.
Deja enfriar completamente a temperatura ambiente 19, luego transfiere al frasco y cierra 20. Ya está lista la sandía confitada, consérvala en el frigorífico 21.