Grittibänz suizos

/5

PRESENTACIÓN

Recorriendo las panaderías europeas seguramente os habréis sorprendido al ver escaparates repletos de estos muñecos coloridos y con formas variadas. En cada país tienen un nombre diferente, pero hoy os hablamos de los grittibänz suizos, es decir, la versión suiza de los similares y galletas Galletas de jengibre (gingerbread). Pero, ¿qué son los grittibänz suizos? Se trata de muñecos de pan brioche suaves y muy fáciles de hacer. La particularidad está en su decoración, siempre representan a un mendigo helado que pasea fumando en su pipa. Tranquilos, no se necesita una gran habilidad manual para preparar los grittibänz suizos y seguramente os divertiréis muchísimo con vuestros hijos formándolos. Y si queréis dar un paseo por Europa con los dulces navideños, no olvidéis probar también las pulla finlandesas y las azevias portuguesas!

INGREDIENTES

Ingredientes para 12 piezas
Harina 00 500 g
Azúcar 40 g
Leche entera 250 g
Mantequilla 60 g
Huevos 1 - medio
Levadura fresca de cerveza 12 g
Sal fina cantidad suficiente
Para decorar
Granillo de avellanas cantidad suficiente
Granillo de pistachos cantidad suficiente
Azúcar granulado cantidad suficiente

Preparación

Para preparar los grittibänz suizos, comenzad vertiendo en un cazo la mantequilla con la leche, luego dejad que vuelvan a temperatura ambiente antes de verter la levadura desmenuzada y disolverla con una cucharita. En la batidora con gancho, o en un bol si trabajáis a mano, verted la harina y el azúcar. Empezad a amasar durante unos diez minutos a velocidad media vertiendo la mezcla de líquidos de una sola vez. Un par de minutos antes de que la masa esté lista, incorporad una cucharadita de sal. Formad una bola, cubridla con film transparente y dejad que la masa fermente durante 2-3 horas o hasta que el volumen del compuesto haya duplicado. Dividid en 12 partes y obtened de cada trozo un cilindro. Tallad los cilindros en uno de los extremos para obtener las piernas, luego más arriba para los brazos y finalmente modelad la cabeza. Usad los sobrantes de masa para decorar los muñecos formando bufandas, sombreros y la característica pipa. Pincelad con el huevo batido la superficie de cada muñeco y espolvoread con azúcar perlado y frutos secos para los zapatos y los sombreros. Poco a poco depositadlos sobre una hoja de papel de horno, colocada sobre una bandeja, y hornead los grittibänz suizos en el horno, ya caliente a 180°, durante unos 30-35 minutos. ¡Una vez fríos podréis disfrutarlos!

Conservación

Una vez listos, los grittibänz suizos se conservan durante 2-3 días bajo una campana de cristal o en una caja de lata.

Consejo

¡Utilizad pasas para hacer los ojitos de vuestros grittibänz suizos!

Curiosidad

En Suiza, los grittibänz suizos abundan en los escaparates de las panaderías locales con el característico aroma de pan. La tradición dice que los niños en la calle que entonan villancicos desde el 11 de noviembre, el día de San Martín, reciben como regalo estos muñecos con un ponche sin alcohol a base de manzana (kinderpunsch) o chocolate caliente. Pero, ¿quién se esconde detrás de su figura? San Martín, en el año 300, al parecer rasgó un trozo de su capa para donarlo a un mendigo que sostenía entre las manos su pipa, la única fuente de calor que tenía. Por eso, el muñeco de pan brioche representa precisamente al pobre que fue salvado por el Santo. La misma tradición se celebra también en otros países de Europa donde el nombre del dulce cambia. En Alemania son conocidos incluso con más nombres como weckmann, en Francia como bonhomme de Saint-Nicolas, (manalas o mannele), en Luxemburgo boxemännchen y en los Países Bajos klaaskerl. En Suiza, finalmente, también son conocidos como grättimaa. Incluso en Italia tenemos un dulce que homenajea la memoria de San Martín: una galleta glaseada y decorada con azúcar que representa al Santo a caballo con su espada y su famoso manto.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.