Solomillo con salsa de roquefort
- Dificultad: Fácil
- Tiempo de preparación: 25 min
- Tiempo de cocción: 12 min
- Porción: 4 Personas
- Costo: Alto
PRESENTACIÓN
El solomillo con salsa de roquefort es un refinado segundo plato a base de tierno solomillo de ternera, acompañado de una sabrosa salsa a base de roquefort, un queso francés elaborado con leche de oveja y caracterizado por vetas azul-verdosas como las de nuestro gorgonzola. Con el término "solomillo" generalmente se refiere a un corte de carne bovina muy tierno y apreciado, procedente de la parte más pequeña del lomo, que se encuentra en la parte posterior de la caja torácica del animal. Este corte de carne, aunque es de calidad, resulta ser menos sabroso que otros y es por eso que normalmente se sirve con salsas de acompañamiento; en nuestro caso la salsa a base de roquefort.
Realizar esta receta es realmente sencillo y requiere poco tiempo, pero te permite llevar a la mesa un plato gourmet de gran efecto.
- INGREDIENTES
- Filete de ternera 400 g
- Sal fina cantidad suficiente
- Canónigos cantidad suficiente
- Nata fresca líquida 125 g
- Roquefort 60 g
- Mantequilla 45 g
Preparación
Para preparar el solomillo con salsa de roquefort toma el lomo, límpialo, quítale la grasa 1 y córtalo en rodajas de aproximadamente 5 cm de grosor 2. Ata ahora cada rodaja con hilo blanco de cocina: da dos vueltas y asegura con un doble nudo el hilo, cortando las partes sobrantes 3.
En una sartén antiadherente derrite la mantequilla 4, añade los solomillos, sala (poco, ya que la salsa es muy sabrosa) y cocina todo a fuego moderado durante unos 6 minutos. Transcurrido este tiempo, gira los solomillos al otro lado y cocina por otros 6 minutos 5. Cuando los solomillos estén listos, apartalos y corta el roquefort en trozos 6.
En la misma sartén añade la nata 7 y el queso 8; mezcla y continúa la cocción hasta que el roquefort se haya derretido completamente y hayas obtenido una consistencia cremosa. Estás listo para emplatar: coloca un solomillo en cada plato, retirando cuidadosamente el hilo, cúbrelo con la salsa y acompáñalo con un poco de canónigos frescos 9. El solomillo con salsa de roquefort está listo, te recomendamos servirlo aún caliente.