Tejas dulces

- Vegetariano
- Dificultad: Fácil
- Tiempo de preparación: 45 min
- Tiempo de cocción: 38 min
- Makes: 40 piezas
- Costo: Bajo
PRESENTACIÓN
Las tejas dulces son unas deliciosas galletas que forman parte de la tradición gastronómica del Valle de Aosta. Su nombre se debe precisamente a su forma, que recuerda a la curvada típica de las tejas. Lograr este efecto es sencillo: basta con equiparse con un rodillo sobre el cual colocar las obleas calientes, que de esta manera tomarán la característica forma. Los ingredientes necesarios para preparar estas sabrosas galletas son pocos y simples, los principales, avellanas y almendras, son los que les confieren su inconfundible aroma. Las tejas dulces son ideales para disfrutar con una taza de café en el desayuno y con un excelente té en la merienda. Si queréis proponerlas como postre al final de una comida o una cena, sin embargo, servidlas con un vino blanco seco, tal vez un Nus Malvoisie Flètri, que retoma las notas de los frutos secos con su retrogusto característico.
No os queda más que preparar estas pequeñas obleas ligeras y crujientes que se disfrutan de un bocado. Las tejas dulces representan una tentación a la que es difícil resistirse, ¡una lleva a la otra!
- INGREDIENTES
- Ingredientes para 40 tejas
- Azúcar 200 g
- Almendras 80 g
- Avellanas 80 g
- Harina 00 60 g
- Mantequilla 60 g
- Claras de huevo 4
- Vaina de vainilla 1
Preparación

Para preparar las tejas dulces, comenzad tostando las almendras y las avellanas: cubrid una bandeja con papel para hornear y colocad encima las almendras y las avellanas 1. Coced en horno estático precalentado a 150° durante 30 minutos o a 130° durante 25 minutos si usáis el horno ventilado. Transcurrido este tiempo, dejad que se entibien y luego pelad las almendras y las avellanas con las manos, después, transferidlas a un mixer junto con la mitad de la cantidad total de azúcar 2. Activadlo por unos segundos, hasta reducir todo a migajas 3.

Transferid la harina de nueces y almendras a un bol grande y añadid la mantequilla que habéis derretido previamente 4, mezclad hasta compactar, ayudándoos con una espátula 5. Añadid las semillas de vainilla, verted la harina en un colador y tamizadla directamente en el bol que contiene la mezcla 6, mezclad bien y dejad a un lado.

Ahora colocad las claras de huevo en un bol y montadlas con un batidor eléctrico 7. Tan pronto como comiencen a montarse, añadid la otra mitad de la cantidad de azúcar 8 y continuad, hasta que obtengáis una mezcla esponjosa y espumosa. Luego incorporad las claras montadas a la mezcla 9.

Mezclad con una espátula para amalgamar y obtener una mezcla homogénea 10. Cubrid nuevamente una bandeja con papel para hornear y colocad con una cuchara pequeñas cantidades de masa de unos 10 g a 3-4 cm de distancia unas de otras. Aplastad cada gota de masa con el dorso de una cuchara 11, formando círculos con un diámetro de unos 7 cm y de un grosor de 1/2 milímetro. Para facilitar la operación, mojáis el dorso de la cuchara, de modo que la masa no se adhiera demasiado a la superficie. Completada esta operación, coced en horno estático precalentado a 180° durante 8 minutos o a 160° durante 3-4 minutos si usáis el horno ventilado. Cuando resulten ligeramente crujientes y doradas, sacadlas del horno y colocadlas sobre un rodillo, de este modo se secarán y adquirirán su típica forma curvada 12. ¡No os queda más que servir vuestras tejas dulces acompañándolas con un excelente vino blanco seco!