Sopa de maíz

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PRESENTACIÓN

La sopa de maíz es un primer plato sabroso y original, que aprovecha la versatilidad del maíz proponiendo una nueva forma de saborearlo.
La sopa de maíz es un plato que se prepara en pocos pasos sencillos: basta preparar un sofrito con zanahorias en dados y puerros en rodajas para formar una base perfumada, añadir maíz fresco, desgranado directamente de las mazorcas y condimentarlo con pimienta y aceite.
Una vez alcanzado el punto de cocción correcto, favorecido por la adición de caldo de verduras, se tritura todo hasta obtener una crema densa y colorida. Para conferirle un toque adicional de sabor, preparad unos deliciosos picatostes, que enriqueceréis con una espolvoreada de pimentón picante: su crujiente textura y sabor decidido contrastarán con la dulzura del maíz y del sofrito y la consistencia cremosa de la sopa.
Con la sopa de maíz abriréis almuerzos y cenas con clase, color y sabor, llevando a la mesa una inédita reinterpretación de este ingrediente!

Probad también estas deliciosas recetas con maíz o mazorcas:

  • Buñuelos de maíz con chutney de tomates
  • Mazorcas fritas

INGREDIENTES

Mazorcas precocidas 2 kg
Puerros 140 g - limpios
Zanahorias 120 g
Caldo vegetal 1 ½ l
Pimienta negra cantidad suficiente
Sal fina cantidad suficiente
Aceite de oliva virgen extra cantidad suficiente
Para los picatostes
Pan casero 4 rebanadas
Pimentón picante 5 g
Aceite de oliva virgen extra cantidad suficiente
Sal fina cantidad suficiente

Preparación

Para preparar la sopa de maíz, empezad desgranando las mazorcas precocidas al vapor: colocadlas sobre una tabla de cortar y cortadlas con un cuchillo a lo largo 1, de lo contrario también podéis desgranarlas con las manos. Continuad limpiando y cortando las verduras que formarán el sofrito: pelad las zanahorias con un pelador 2, luego cortadlas en bastoncillos finos y finalmente en dados 3.

Luego colocad el puerro sobre una tabla de cortar y eliminad ambos extremos (4-5), luego cortadlo en rodajas 6.

Transferid las zanahorias en dados 7 y el puerro en rodajas 8 a una olla grande de bordes altos, rociadlas con un hilo de aceite de oliva virgen extra y rehogad a fuego medio durante unos minutos 9.

Cuando las verduras del sofrito estén bien doradas, añadid los granos de maíz 10 y dejad que se impregnen durante 5-6 minutos a fuego lento. Luego salpimentad al gusto 11, añadid el caldo de verduras hasta cubrir la mezcla 12 y dejad cocer durante unos 35 minutos. Para descubrir cómo preparar mejor el caldo de verduras, consultad la Escuela de cocina: Caldo de verduras.

Mezclad de vez en cuando y cuando la mezcla se haya ablandado y haya absorbido parte del caldo 13, introducid la batidora de inmersión en la olla 14 y triturad hasta obtener una mezcla densa y homogénea 15, añadiendo más caldo si es necesario. Dejad cocer durante unos 5 minutos y finalmente apagad el fuego.

Mientras tanto, preparad los picatostes para acompañar la sopa de maíz: cortad 4 rebanadas de pan de trigo duro y colocadlas en una bandeja forrada con papel de horno, luego verted un hilo de aceite de oliva virgen extra sobre cada rebanada 16. Luego salpimentad al gusto y espolvoread cada rebanada con pimentón picante en polvo 17. Una vez condimentadas las rebanadas de pan, hornead en horno estático precalentado a 250° durante 5 minutos en modo grill, hasta que estén ligeramente tostadas y crujientes 18. Si utilizáis horno ventilado, coced a 240° durante 2 minutos y medio en modo grill.

Transcurrido este tiempo, sacad todo del horno y dejad enfriar las rebanadas de pan sobre una rejilla, luego colocadlas sobre una tabla de cortar y divididlas por la mitad a lo largo, formando bastoncillos 19 o cubitos. Servid la sopa de maíz y acompañadla con los picatostes 20. Espolvoread todo con una pizca de pimienta y terminad vertiendo un hilo de aceite 21: ¡no os queda más que servir y disfrutar la sopa de maíz con los picatostes bien caliente!

Conservación

Podéis conservar la sopa de maíz durante un máximo de 2 días en el frigorífico en un recipiente hermético o bien cubierta con film transparente. La sopa de maíz se puede congelar.

Consejo

Suavidad o crujiente, ese es el dilema. Si estáis buscando un método para obtener una sopa aún más cremosa, añadid un poco de nata o mascarpone durante la preparación; si en cambio queréis perfeccionarla con algún trocito más sólido, lanzaros a los daditos! El bacon es perfecto, pero también cortar los picatostes y esparcirlos en la sopa podría ser una buena idea. Si no encontráis las mazorcas precocidas, no os preocupéis y echad mano a esa lata de maíz al fondo de la despensa: ¡ha llegado el momento de usarla!

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.