Estofado de remolachas y lentejas

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PRESENTACIÓN

¡No hay Año Nuevo sin el tradicional cotechino y lentejas! Ambos son símbolos de riqueza y prosperidad, estos dos ingredientes de buen augurio han sido interpretados de las maneras más variadas, desde las versiones más rústicas hasta las gourmet, como el elegante milhojas de cotechino y lentejas. ¿Y si los invitados son vegetarianos? Para asegurarse de que nadie tenga que renunciar a un momento tan simbólico como convivencial, os proponemos una receta que une tradición e innovación: estofado de remolachas y lentejas. Un plato rico y reconfortante que a primera vista podrá engañar a los menos atentos, pero que al probarlo revelará una verdadera explosión de sabores y aromas: el aroma del vino, las especias y las hierbas aromáticas acompaña maravillosamente el sabor de las remolachas, las legumbres y las cebollitas, y se realza con la larga cocción. Un procedimiento que recuerda mucho a la preparación de un clásico de la cocina francesa, el boeuf bourguignon, y que efectivamente se inspira en él. Ya seáis omnívoros o vegetarianos, italianos o franceses, de gustos más caseros o refinados, el estofado de remolachas y lentejas, servido junto con una suave polenta, reunirá a todos alrededor de la misma mesa para comenzar el año con un espíritu de compartir y buen comer.

INGREDIENTES
Remolachas 350 g - (remolachas)
Lentejas 180 g
Cebollitas 170 g
Zanahorias moradas 100 g
Zanahorias 85 g
Ajo 1 diente
Jengibre fresco cantidad suficiente - (1 raíz pequeña)
Romero 1 ramita
Laurel 5 hojas
Canela en rama 1
Vino tinto 125 g - consistente
Agua 700 g - aproximadamente
Aceite de oliva virgen extra 25 g
Mantequilla 40 g
Tomillo cantidad suficiente - fresco
Sal fina cantidad suficiente
Pimienta negra cantidad suficiente

Preparación

Para realizar el estofado de remolachas y lentejas, primero preparad todos los ingredientes: lavad y pelad las zanahorias naranjas y moradas 1, luego cortad ambas en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor (2-3).

Pelad también las remolachas 4 y divididlas en mitades 5, luego pelad una raíz pequeña de jengibre fresco y cortadla en rodajas finas 6.

Aplastad el diente de ajo con el dorso de un cuchillo 7 y retirad la cáscara. Atad con un cordel las ramas con las hojas de laurel, el ramito de romero y la rama de canela 8. Finalmente, enjuagad las lentejas bajo el agua corriente 9 y haced lo mismo con las cebollitas.

Ahora coged una olla de hierro fundido con tapa hermética, particularmente adecuada para cocciones lentas, calentad el aceite y agregad el diente de ajo aplastado y el jengibre 10. Dejad chisporrotear durante un par de minutos a fuego vivo, luego unid el ramillete de aromas 11 y, poco después, añadid también las cebollitas 12,

las zanahorias en rodajas 13, las lentejas 14 y las remolachas 15.

Dorad todo durante unos minutos mezclando a menudo con una cuchara de madera, luego desglasad con el vino tinto 16 y dejad que se evapore. En este punto, bajad el fuego y cubrid con agua al ras (la cantidad de agua dependerá del tamaño de la olla, nosotros usamos 500 g para una olla de 20 cm de diámetro) 17. Cubrid con la tapa 18 y dejad cocinar a fuego lento durante 2 horas, mezclando de vez en cuando y añadiendo un poco más de agua si es necesario: en este caso, añadimos otros 200 g de agua un par de veces. Durante los últimos 20 minutos podéis ajustar de sal y pimienta. Si al final de la cocción el estofado resultara demasiado caldoso, dejad que se reduzca durante unos minutos sin tapa; si, por el contrario, quedara demasiado seco, podéis añadir otra cucharada de agua.

Pasadas las 2 horas, retirad el ramillete de aromas y comprobad la cocción de las remolachas con un tenedor: los dientes deben penetrar fácilmente, pero la consistencia debe ser aún firme y carnosa. En este punto, apagad el fuego y añadid el tomillo fresco 19, luego incorporad la mantequilla 20, cubrid con la tapa y dejad que se derrita suavemente. Por último, mezclad bien y servid vuestro aromático estofado de remolachas y lentejas con polenta o puré 21.

Conservación

El estofado de remolachas y lentejas se puede conservar en el frigorífico durante 2-3 días o se puede congelar.

Consejo

Puedes añadir a la preparación también cubitos de patatas o calabaza, transformando así el estofado en un plato único y rico.

Si el ajo no os intimida, podéis exprimir un diente crudo al final de la cocción.

¡No os perdáis también la receta del estofado de pollo con castañas y setas, excelente para una cena otoñal!

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.