Pasta de almendra

/5

PRESENTACIÓN

Quien haya ido de vacaciones al menos una vez a Sicilia seguramente conservará entre sus recuerdos algunas de las especialidades más deliciosas de esta hermosa isla... desde los Cannoli siciliani hasta la Cassata siciliana, son muchos e irresistibles los pecados de gula que se pueden conceder para tener un vistazo a la tradición repostera siciliana. Entre los ingredientes más utilizados encontramos las almendras, que son precisamente el ingrediente principal de la receta que os proponemos hoy: las pastas de almendra. Estos dulces también se preparan en otras regiones del sur de Italia y en muchas formas diferentes: nosotros hemos optado por estos pastelitos con una deliciosa cereza confitada (o una almendra) y por los Pizzicotti de pasta de almendra. Después del café o para acompañar el momento del té, las pastas de almendra son perfectas con su extrema dulzura y la consistencia que se mantiene más crujiente en el exterior y suave en el interior. Una receta sencilla que requiere pocos ingredientes y pocos pasos, pero también mucha paciencia y cuidado con los detalles... solo así de hecho lograréis reproducir fielmente la inolvidable bondad de las pastas de almendra. Si queréis crear una bandeja de pastelitos, también podéis preparar unas suaves y aromáticas Cartuchos napolitanos para servir junto a ellas!

INGREDIENTES

Ingredientes para 20 pastas de almendra
Almendras peladas 250 g - enteras
Azúcar 250 g
Claras de huevo 60 g - (aproximadamente 2 pequeños)
Aroma de almendra ½ cucharadita
para decorar
Cerezas confitadas cantidad suficiente
Almendras cantidad suficiente - enteras

Preparación

Para preparar las pastas de almendra, coloque en un procesador de alimentos con cuchillas de acero las almendras peladas 1 y el azúcar 2 y mezcle hasta reducirlas a polvo 3. Recuerde que este paso debe durar pocos minutos para evitar que las almendras se calienten demasiado y liberen su aceite.

Agregue las claras de huevo 4 y el aroma de almendra 5 y mezcle nuevamente para combinar todo. La masa estará lista cuando esté compacta pero suave al tacto 6, luego transfiérala a una manga pastelera bien resistente con boquilla estriada de 10 mm.

Forre una bandeja de horno con papel de horno que puede fijar mejor exprimiendo un poco de masa en las 4 esquinas de la bandeja 7. Forme montoncitos de 3 cm de diámetro y unos 2 cm de altura 8 y decore parte de ellos con las cerezas confitadas cortadas por la mitad 9

y parte con las almendras enteras 10. En este punto, coloque la bandeja en el frigorífico y deje enfriar las pastas de almendra durante al menos 7 horas (o aún mejor toda la noche), cubiertas con film transparente. Pasado este tiempo, retire la bandeja 11, hornee en un horno ventilado precalentado a 180° durante unos 15 minutos, colocando la bandeja en el estante medio. Tenga cuidado de no cocinarlas demasiado, de lo contrario no estarán lo suficientemente suaves en el interior: deben quedar un poco pálidas 12. Una vez horneadas, deje enfriar y sirva sus pastas de almendra!

Conservación

Las pastas de almendra se pueden conservar a temperatura ambiente durante aproximadamente una semana, cerradas en bolsas de plástico para alimentos. No se recomienda la congelación.

Consejo

El tiempo de enfriamiento es fundamental para permitir que las pastas de almendra mantengan la forma durante la cocción, por lo tanto, si es posible, déjelas reposar en el frigorífico toda la noche. Puede sustituir el aroma de almendra con el de vainilla, o agregar ralladura de limón o agua de azahar para un sabor ligeramente diferente. En cuanto a la decoración, ¡utilice su fruta seca favorita!

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.