Krapfen salados con patatas y Emmentaler

/5

PRESENTACIÓN

Los krapfen salados con patatas y Emmentaler son unos deliciosos bocaditos de masa crujiente, fritos y rellenos de sabroso queso fundido.
La receta de la masa levada es como la de los clásicos krapfen dulces, a base de harina y patatas cocidas trituradas, lo que los hace muy suaves y esponjosos, pero la adición de un poco más de sal permite tener una versión salada de estas deliciosas frituras.
¡Un suave corazón de Emmentaler fundido hace que los krapfen salados sean realmente irresistibles!

INGREDIENTES

Ingredientes para 20 mini krapfen
Agua 50 ml
Harina 00 250 g
Harina Manitoba 250 g
Levadura seca de cerveza 12 g
Malta 1 cucharadita
Aceite de oliva virgen extra 50 ml
Patatas 300 g - harinosas hervidas y peladas
Sal fina 10 g
Huevos 1
Emmentaler 80 g
para pincelar
Claras de huevo 1
para freír
Aceite de semillas cantidad suficiente

Preparación

Para preparar los krapfen salados con patatas y Emmentaler, primero cuece las patatas, escúrrelas y pásalas por el pasapurés (o prensapatatas) 1. Disuelve la levadura en el agua 2 y el malta 3.

Tamiza los dos tipos de harina en un bol grande y añade la levadura disuelta 4, el huevo, las patatas trituradas 5 y el aceite 6.

Amasa con las manos y añade la sal 7; sigue amasando hasta obtener una masa lisa y homogénea 8. Coloca la masa en un bol cubierto con film plástico 9 y deja levar durante aproximadamente 2 horas en el horno apagado y cerrado con la luz encendida.

Mientras tanto, corta el queso en cubos 10. Cuando la masa haya duplicado su volumen 11, transfiérela a una superficie enharinada y divídela por la mitad 12.

Estira con el rodillo el primer trozo en una hoja de medio centímetro de grosor 13 y con un cortapastas de 5 cm de diámetro saca 20 círculos 14. Colócalos en una bandeja de horno o en un plato cubierto con papel de horno y ligeramente enharinado. Píntalos con la clara de huevo 15 y

rellénalos con un cubito de Emmentaler 16. Estira también la otra mitad de la masa de la misma manera y saca el mismo número de círculos, luego colócalos sobre los otros, presionando ligeramente los bordes para sellarlos 17. Cubre la bandeja con film plástico y colócala en el horno para que leve otra hora 18.

Calienta el aceite de semillas (la temperatura debe ser de unos 180°) y cuando tus krapfen estén hinchados 19, fríelos en aceite caliente (180°) durante unos minutos, girándolos para que se doren por ambos lados 20. Escúrrelos y colócalos en un plato con papel absorbente 21. Antes de servir, espolvoréalos con sal y pimienta negra: ¡los krapfen salados con patatas y Emmentaler están listos para ser disfrutados!

Conservación

Puedes conservar los krapfen en el frigorífico como máximo por 1 día.
Puedes congelar los krapfen ya cocidos aunque no estarán tan crujientes como recién hechos.
Puedes congelar la masa de los krapfen después de las primeras dos horas de levado y luego, una vez descongelada, déjala levar de nuevo y procede como en la receta.

Consejo

Si quieres, puedes cortar el papel de horno en cuadrados y sumergir los krapfen directamente en el aceite sin despegarlos porque el papel de horno se desprenderá solo y no comprometerá el buen resultado de tus krapfen.
Puedes aromatizar los krapfen añadiendo pimienta negra molida a la masa.
Puedes cocinar los krapfen también en el horno y hornearlos (después de haberlos pincelado con una yema con algunas cucharadas de nata) a 180° durante 15-20 minutos o hasta que la superficie esté dorada. En caso de que los cocines en el horno, puedes decorarlos con algunas semillas de amapola.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.