Croissants salados

Para preparar los croissants salados, lo primero que hay que hacer es empezar a hacer la masa de hojaldre. Disolved la levadura en agua a temperatura ambiente (1-2). En un robot de cocina con gancho, verted las dos harinas 3,

añadid luego la levadura 4 y el azúcar 5. Encended el robot hasta obtener una masa homogénea 6.

Luego añadid el aceite 7 y dejadlo incorporar hasta que la masa se adhiera al gancho. Por último, agregad la sal 8 y trabajad unos minutos más hasta que se absorba 8. Luego, transferid a una superficie de trabajo 9

y formad una bola con la masa 10. Transferid a un bol, cubrid con film plástico 11 y dejad levar a temperatura ambiente durante 2 horas. Mientras tanto, transferid la mantequilla a una superficie enharinada 12

y, añadiendo un poco de harina, extendédla con un rodillo 13 hasta obtener un cuadrado de 20x20 cm de unos medio cm de grosor 14. Luego envolved en film plástico para alimentos 15 y guardad en el frigorífico.

Al final de la levadura 16, transferid la masa a una superficie enharinada 17 y, con el rodillo, extendédla para obtener un cuadrado de 30x30 cm 18.

Colocad el bloque de mantequilla en el centro del cuadrado para formar un rombo 19. Luego plegad las extremidades de la masa hacia el centro del bloque de mantequilla 20, haciendo que se junten los bordes pero sin superponerlos. Sellad los bordes con los dedos 21. Dejad reposar en el frigorífico durante 10-15 minutos.

Colocad nuevamente el cuadrado obtenido en una superficie ligeramente enharinada y extendédla para alargar solo uno de los lados 22 hasta obtener un rectángulo de 44 cm de largo y medio cm de grosor. Luego haced el primer pliegue a 3 llevando un borde de la masa a 1/3 del rectángulo 24

y cubrid con el otro borde 25: el primer pliegue está listo. Cubrid con film plástico y dejad reposar durante al menos 30 minutos en el frigorífico. Volved a coger la masa y colocadla siempre en la superficie enharinada 26; extendédla en dirección de los pliegues 27

hasta obtener un rectángulo de las mismas dimensiones que antes. En este punto, repetid el pliegue a 3 llevando siempre un borde de la masa a 1/3 del rectángulo y el otro para cubrir (29-30). Envolved en film plástico para alimentos, guardad en el frigorífico durante otros 30 minutos y haced un último pliegue a 3 como os acabo de explicar. Envolved nuevamente en film plástico para alimentos y dejad reposar nuevamente en el frigorífico, esta vez durante unos 120 minutos.

Finalmente, volved a coger la masa y extendédla a un grosor de unos 2-3 mm hasta obtener un rectángulo de 75 cm de ancho y 15 cm de largo. De aquí tendréis que sacar 15 triángulos de 10 cm de base y 15 cm de altura 32. En este punto, mantened bien firme con una mano la base de uno de los triángulos y con la otra mano estirad delicadamente la masa para aumentar su longitud en 1/4 33.

Ahora solo os queda enrollar vuestro croissant comenzando desde la base sin aplastar ni apretar demasiado 34. Tendréis que obtener 2 vueltas completas, es decir, 3 espiras 35. Preparad así todos los croissants y colocadlos a medida que los hacéis en una bandeja de horno, espaciándolos bien entre ellos.

Pintad la superficie con una yema de huevo batida 37 y decorad algunos croissants con semillas de sésamo blanco y otros con semillas de sésamo negro 38. Dejad que leven durante una hora y media a temperatura ambiente. Hornead en horno ventilado precalentado a 200° durante 30 minutos, controlando la cocción sin abrir el horno hasta que estén bien dorados. Sacad del horno 39 y dejad enfriar antes de cortar y rellenar vuestros croissants salados.