Caramelos de hojaldre con bresaola, queso robiola y pistachos
- Medio
- 40 min
- Kcal 243
Las trufas saladas Arlecchino son un aperitivo delicioso y colorido, perfecto para añadir un toque de creatividad a vuestra mesa. Se comen de un solo bocado y se deshacen en la boca, gracias a la mezcla cremosa realizada con mascarpone, queso robiola y jamón cocido. Estas suaves porciones se cubren luego con diferentes rebozados a base de especias o granillo, que añaden un toque crujiente y variado. Fáciles y rápidos de preparar, las trufas saladas Arlecchino son ideales para bufés, aperitivos y cenas informales en las que queráis sorprender con una idea alegre y original. Perfectas para Carnaval, son extremadamente versátiles y se pueden personalizar como prefiráis para crear siempre nuevas combinaciones de colores y sabores.
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Para preparar las trufas saladas Arlecchino, lo primero que tenéis que hacer es poner el jamón cocido en una batidora, añadir el Parmigiano 1 y batir. Añadir la robiola 2 y el queso cremoso 3, luego batir hasta obtener una mezcla homogénea. Transferir todo a un bol.
Tomar una cucharada de la mezcla 4 y formar una bolita 5. Continuar hasta agotar la mezcla; con estas cantidades obtendréis aproximadamente 16 trufas. Colocarlas poco a poco en una bandeja 6.
Verter la cúrcuma, las semillas de amapola, el granillo de pistachos y el de avellanas en recipientes separados, luego cubrir las trufas con los diferentes rebozados 7 8. ¡Vuestras trufas saladas Arlecchino están listas para ser servidas 9!