Raviolis de castañas y salchicha

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PRESENTACIÓN

Castañas y vino joven: sabores de otoño y sabores de antaño. Olor a brasa y a bodegas, historias antiguas de casas de campo cercanas y lejanas que se entrelazan en las noches pasadas junto al calor de la chimenea. Para recuperar un poco de estas sensaciones también en la vida cotidiana, os proponemos los raviolis de castañas y salchicha: una fina pasta de huevo hecha en casa encierra un sabroso relleno de castañas desmenuzadas y jugosa salchicha. Estos suaves pañuelitos de pasta se sumergen en una reducción de vino joven, un vino obtenido mediante la maceración carbónica de los granos de uva no prensados. Un verdadero alimento que calienta el corazón con su sabor y aroma, sería incluso perfecto para la cena de Nochebuena si sois de los que no siguen la tradición. Descubrid todo el sabor del otoño en este primer plato casero de raviolis de castañas y salchicha.

INGREDIENTES

para la pasta fresca
Harina 00 300 g
Huevos 3
para el relleno
Salchicha 250 g
Castañas 500 g
Salvia cantidad suficiente
Grana Padano DOP 50 g
Huevos 1
para la salsa de acompañamiento
Vino tinto 500 g - nuevo
Chalote 1
Aceite de oliva virgen extra 10 g
Mantequilla 50 g

Preparación

Para realizar los raviolis de castañas y salchicha, comenzad con la cocción de las castañas: verted las castañas enteras en una olla con agua hirviendo 1 y hervidlas durante 30 minutos. Mientras tanto, preparad la pasta: tamizad la harina en un bol 2, añadid los huevos 3.

Amasad con las manos 4 hasta obtener un bloque compacto 5, envolvedlo con film transparente y dejadlo reposar durante 30 minutos en un lugar fresco y seco. Mientras tanto, ocupaos de la salchicha: cortad la tripa a lo largo 6

y retiradla, picad la salchicha 7 y las hojas de salvia 8. Mientras tanto, las castañas estarán cocidas 9.

escurridlas 10 y enfriadlas en un bol con agua fría 11. Una vez frías, peladlas 12 y reservadlas.

En una sartén, verted la salchicha 13, doradla en su grasa durante 5 minutos, luego aromatizad con la salvia picada 14. En un bol, desmenuzad groseramente las castañas con las manos, verted la salchicha dorada 15

sazonad con el Grana Padano rallado 16, comenzad a mezclar y luego añadid también el huevo 17 y amasad el relleno para amalgamarlo 18.

Recuperad el bloque de pasta, dividid en trozos con un cortador, enharinad cada trozo 19, pasad el primer trozo (los demás podéis dejarlos envueltos en film transparente hasta que los estiréis) e introducidlo en la máquina para estirar pasta 20, deberéis trabajarlo desde el grosor más grande hasta el penúltimo, pasando la pasta por este último varias veces hasta obtener hojas del grosor de 2-3 mm. Dividid la hoja por la mitad y cortad cuadrados de aproximadamente 5x5 cm 21.

En el centro de cada cuadrado, colocad una bolita de relleno 22. Cerrad la pasta uniendo dos esquinas opuestas para crear triángulos 23 y sellad bien los bordes presionando ligeramente con los dedos. A medida que hagáis los raviolis, colócadlos en una bandeja cubierta con un paño enharinado 24.

Poned al fuego una olla con abundante agua que luego se usará para cocinar los raviolis; sal y llevad a ebullición. Mientras tanto, limpiad la chalota y cortadla finamente 25. Calentad el aceite de oliva en una sartén, añadid la chalota 26 y doradla durante unos minutos, luego cubridla con el vino joven 27 y cocinad a fuego medio durante 30 minutos para reducir la salsa.

Cuando la salsa se haya espesado, apagad el fuego 28 y filtradla a través de un colador (29-30).

Hervid los raviolis durante 5 minutos en la olla con el agua que habrá alcanzado el punto de ebullición 31, mientras tanto, derretid la mantequilla en una sartén 32 y agregad la salsa de vino joven 33, calentad a fuego moderado.

Una vez que los raviolis estén listos, escurridlos con una espumadera directamente en la sartén con la salsa de vino joven 34, añadid un cucharón de agua de cocción 35 y saltead brevemente, el tiempo necesario para sazonar los raviolis. Servid inmediatamente los raviolis de castañas y salchicha, aromatizando el plato con hojas de salvia fresca 36.

Conservación

Se recomienda consumir inmediatamente los raviolis de castañas y salchicha. Se desaconseja congelar la preparación una vez cocida. Podéis congelar los raviolis crudos y cocinarlos directamente congelados. Para congelar los raviolis, se recomienda colocarlos en una bandeja bien separados y ponerlos en el congelador el tiempo suficiente para endurecerlos, de esta manera podréis luego guardarlos en una bolsa de congelación sin riesgo de que se peguen entre sí.

Consejo

Si no os gusta la salsa de vino joven, podéis condimentar los raviolis solo con mantequilla y salvia. Para una versión vegetariana, podéis sustituir la salchicha con ricota.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.