Bigoli con espárragos, alcachofas y pesto de guisantes

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PRESENTACIÓN

Los bigoli con espárragos, alcachofas y pesto de guisantes son un primer plato genuino y sabroso, los ingredientes son frescos y de temporada y la pasta está hecha rigurosamente en casa.
Este formato típico de la tradición culinaria véneta se realizaba con prensas accionadas manualmente, hoy sustituidas por accesorios específicos que se incluyen con las máquinas para pasta.
Estos gruesos espaguetis porosos retienen perfectamente cualquier tipo de condimento, el que os proponemos en esta receta es un sabroso pesto de guisantes enriquecido con alcachofas, espárragos y cubitos de panceta, ¡un derroche de sabores en honor al verano!

Prueba también la pasta alla vignarola, un delicioso primer plato de primavera, típico de la cocina laziale.

INGREDIENTES

Ingredientes para los bigoli
Harina 00 400 g
Huevos 4 - (medianas)
para el condimento
Guisantes 300 g
Espárragos 500 g
Alcachofas 500 g
Piñones 1 cuchara
Panceta ahumada 100 g
Aceite de oliva virgen extra cantidad suficiente
Tomillo cantidad suficiente
Parmesano Reggiano DOP 50 g - (para rallar)
Caldo vegetal 250 ml
Zumo de limón ½ - (para remojar las alcachofas)
Sal fina cantidad suficiente
Pimienta negra cantidad suficiente

Preparación

Para preparar los bigoli con espárragos, alcachofas y pesto de guisantes, empieza por la preparación de la pasta fresca: en un bol vierte la harina, crea el clásico volcán y en el centro añade los huevos 1. Luego comienza a trabajar los ingredientes con las manos, ampliando cada vez más para tomar la harina 2. Transfiere la masa sobre una superficie de trabajo y amásala durante al menos 10 minutos hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Forma un bloque y cúbrelo con film transparente 3, luego déjalo reposar a temperatura ambiente durante unos 30 minutos.

Lava cuidadosamente los espárragos bajo el agua corriente, eliminando la parte verde fibrosa con un pelador 4. Cuécelos durante unos 10 minutos en agua hirviendo en el cesto de una espárraguera, teniendo cuidado de dejar fuera las puntas de los espárragos, la parte más delicada (los tiempos de cocción pueden variar según el diámetro del tallo) 5. Una vez cocidos, corta los tallos en trozos 6 y conserva las puntas enteras aparte.

Mientras tanto, cuece los guisantes en agua hirviendo 7; cuando estén tiernos, escúrrelos 8, transfiérelos a la batidora, añade el aceite de oliva 9, los piñones

y el parmesano rallado 10. Tritura los guisantes hasta obtener una mezcla cremosa 11 y déjala a un lado. Recupera la pasta fresca y prepara los bigoli con la máquina específica. Divide la masa en pequeños bloques para introducir en el cesto que recoge la masa, acciona la máquina para crear los bigoli 12

y colócalos sin superponerlos sobre una superficie bien enharinada 13. Mientras tanto, limpia las alcachofas eliminando las hojas externas más duras, corta en tiras el corazón 14 y para evitar que se oscurezcan consérvalos en un bol con agua y el zumo de medio limón. Calienta un poco de aceite en una sartén, saltea los cubitos de panceta durante unos instantes y luego añade las alcachofas 15,

vierte un cucharón de caldo 16 y cuece las alcachofas durante 5 minutos, luego añade los espárragos en trozos 17, salpimienta y aromatiza con las hojas de tomillo y deja que tomen sabor durante unos minutos. Mientras tanto, cuece los bigoli en abundante agua 18 salada durante pocos minutos

luego escúrrelos directamente en la sartén con el condimento 19, en este punto incorpora el pesto de guisantes 20 mezcla y finalmente añade las puntas de los espárragos. ¡Los bigoli con espárragos, alcachofas y pesto de guisantes están listos para ser disfrutados 21!

Conservación

Se recomienda consumir inmediatamente los bigoli con espárragos, alcachofas y pesto de guisantes, puedes conservar aparte el pesto de guisantes y congelarlo si has usado ingredientes frescos. Puedes congelar o conservar al vacío los bigoli. Para la congelación puedes proceder poniendo la bandeja con los bigoli en el congelador para endurecerlos un par de horas. Cuando estén bien endurecidos, ponlos en bolsas de congelación, preferiblemente ya racionados, y guárdalos nuevamente en el congelador. Cuando los necesites, cuécelos directamente congelados en agua hirviendo y procede según la receta.

Consejo

Si no dispones de la máquina específica para bigoli, puedes usar una picadora de carne o, alternativamente, puedes hacerlos a mano extendiendo la masa y creando finos palitos, quedarán solo un poco más rústicos.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.