Patatas y cebollas al horno

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PRESENTACIÓN

Patatas y cebollas al horno: ¡la guarnición simple e irresistible que conquista a todos!

¿Estáis buscando una guarnición sabrosa, rústica y facilísima de preparar, perfecta para acompañar asados, carnes, pescado o simplemente para dar un toque de calidez a vuestra mesa? Esta receta de patatas y cebollas al horno es lo que necesitáis.

En pocos pasos, obtendréis gajos dorados y crujientes por fuera, tiernos por dentro, realzados por el dulce aroma de las cebollas y el toque aromático del romero.

Con esta variante de las clásicas Patatas al horno, os guiaremos paso a paso: desde la preparación hasta la cocción perfecta, incluyendo consejos para conservar vuestra guarnición sin perder sabor ni crujiente.

Utilizad los trucos para obtener un resultado impecable y sorprendad a vuestros invitados con un plato que sabe a hogar y sencillez.

He aquí otras formas de preparar las patatas:

INGREDIENTES
Patatas 1 kg
Cebollas rojas 400 g
Aceite de oliva virgen extra 80 g
Sal fina cantidad suficiente
Romero cantidad suficiente

Preparación

Para preparar las patatas y cebollas al horno, lo primero que hay que hacer es pelar las patatas 1 y cortarlas primero por la mitad 2 y luego en gajos 3

Repetid esta operación con todas las patatas 4 y trasladadlas a un bol grande. Pelad y cortad finamente las cebollas 5 6.

Incorporad las cebollas a las patatas 7, añadid 3 cucharadas de aceite 8 y el romero picado 9.

Finalmente, añadid la sal 10 y mezclad bien 11. Trasladad todo a una bandeja cubierta con papel de horno 12.

Distribuidlas de manera uniforme, evitando que se superpongan 13. Cocinad en el horno estático precalentado a 200°C durante unos 40 minutos, mezclando sin romperlas a mitad de cocción, hasta que las patatas estén doradas y crujientes. Sacad las patatas y cebollas del horno 14, servidlas bien calientes, añadiendo en crudo las 3 cucharadas de aceite restantes 15.

Conservación

Las patatas y cebollas al horno sobrantes pueden conservarse en el frigorífico, en un recipiente hermético, durante 1–2 días como máximo, bien cubiertas.
Cuando las sirváis, recalentadlas en el horno estático o ventilado a temperatura moderada para devolverles el crujiente (mejor que usar el microondas, que las haría blandas).

Consejo

Aseguraos de que los gajos tengan espacio en la bandeja, así el aire caliente puede circular mejor y todas las superficies quedan doradas.

Además del romero, podéis añadir unas hojitas de tomillo, salvia o una pizca de pimentón dulce, para dar un toque aromático extra.

En los últimos 5 minutos podéis activar el grill del horno para obtener una supercrujiente capa.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.