Tarta vertida con mermelada

/5

PRESENTACIÓN

Hemos hecho muchas tartas con mermelada: friables crostate, suaves tartas, deliciosas sacher y simpáticas molinos de hojaldre. Lo que nunca habíamos hecho, y que os proponemos aquí, es un dulce "ingenioso" con un relleno que se añade durante la cocción: la tarta vertida con mermelada. Siguiendo esta receta obtendréis un dulce con el relleno habitual dentro, pero con un pequeño truco, una tarta con mermelada buenísima. ¿Cuántas veces el chocolate o la fruta u otros tipos de rellenos terminan inexorablemente en el fondo de vuestras tartas? Siguiendo paso a paso la receta de la tarta vertida con mermelada, veréis cómo será fácil hacer que el relleno quede exactamente en el centro de vuestro dulce, perfecto al corte y grandioso al gusto. Solo queda elegir vuestra mermelada favorita, serán adecuadas las más comunes de albaricoque, pero también las más insólitas como la mermelada de granada. El resultado será una tarta deliciosa y de sabores tradicionales, perfecta como merienda pero también adecuada para el postre.

INGREDIENTES

Ingredientes (para una tarta de 20 cm de diámetro)
Almidón de maíz 50 g
Harina 00 100 g
Huevos 120 g
Azúcar moreno 120 g
Leche de almendras 60 g
Aceite de girasol 60 g
Harina de avellanas 20 g
Levadura en polvo para postres 8 g
para rellenar
Mermelada de frutos del bosque 200 g
para decorar
Azúcar glas cantidad suficiente

Preparación

Para realizar la tarta vertida primero verted en un bol el azúcar moreno, añadid los huevos 1 y mezclad con las varillas eléctricas 2 hasta obtener una mezcla clara. En este punto incorporad también el aceite de semillas 3.

Verted la harina 00 4, la maicena, la levadura tamizada 5 y la leche de almendra 6.

Finalmente incorporad también la harina de avellanas 7 y mezclad con la espátula hasta que la mezcla esté bien amalgamada 8. Verted la mitad de la masa en un molde sin fondo de 20 cm de diámetro colocado sobre una bandeja revestida con papel de horno 9.

Coced en horno estático precalentado a 180° durante 8 minutos. Sacad la bandeja del horno pero no lo apaguéis 10, verted encima la mermelada 11 y distribuidla con una espátula. Cubrid con la masa restante 12 teniendo cuidado de no mezclarla con la mermelada de abajo.

Nivelad la superficie con una espátula 13 y hornead nuevamente por otros 30 minutos. Una vez cocida, sacad la tarta del horno 14, dejadla enfriar, finalmente desmoldadla pasando alrededor del borde un cuchillo afilado, así podréis extraer mejor el aro 15.

Voltead la tarta sobre un plato de presentación 16. Ahora colocad sobre la superficie del dulce unas hojas de papel, sin cubrirlo completamente, así crearéis un motivo geométrico espolvoreando con azúcar glas las partes descubiertas 17. La tarta vertida está lista para ser degustada 18.

Conservación

La tarta vertida se conserva por 2 días a temperatura ambiente bajo una campana de vidrio.

Consejo

Si no disponéis del molde de aro podéis usar también una tortera con cierre desmontable o bien una tortera clásica con el borde no inclinado. Podéis variar el sabor de la mermelada para rellenar vuestra tarta vertida, desaconsejamos para esta receta utilizar cremas que podrían requerir dosis y procedimientos diferentes.

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.