Orzotto con garbanzos, anchoas y ricotta salada

- Energia Kcal 509
- Carbohidratos g 63.2
- de los cuales azúcares g 3.3
- Proteína g 23.1
- Grasas g 17.3
- de las cuales grasas saturadas g 4.85
- Fibra g 12.7
- Colesterol mg 45
- Sodio mg 1155
- Dificultad: Fácil
- Tiempo de preparación: 30 min
- Tiempo de cocción: 25 min
- Porción: 4 Personas
- Costo: Medio
- Notas + preparación de caldo vegetal
PRESENTACIÓN
La redescubrimiento de los alimentos se ha convertido en una verdadera pasión que lleva a nuestras mesas muchos productos de antiguas tradiciones, como la cebada perlada, un cereal generalmente utilizado en la preparación de sopas y guisos. Además de proponer este ingrediente en la versión con calabacines y flores de calabacín, os sugerimos una combinación por descubrir: el orzotto con garbanzos, anchoas y ricotta salada. Los deliciosos granos blancos y redondeados de la cebada, con su sabor delicado, se acompañan de los intensos aromas del mar encerrados en las anchoas. La cremosidad del plato se casa perfectamente con la consistencia harinosa de los garbanzos, todo ello condimentado con una sabrosa espolvoreada de ricotta salada: el toque final para obtener el justo punto de sal. El orzotto no solo es una válida alternativa a los clásicos risottos, sino que lleva a la mesa toda la bondad de los cereales en una perfecta mezcla de sabores.
INGREDIENTES
- Cebada perlada 320 g
- Garbanzos precocidos 230 g
- Caldo vegetal 1 l
- Cebolleta fresca 1
- Chile fresco 1
- Perejil cantidad suficiente
- Tomillo cantidad suficiente
- Aceite de oliva virgen extra 20 g
- para las anchoas
- Anchoas 250 g - (enteras)
- Vino blanco 50 ml
- Ajo 1 diente
- Aceite de oliva virgen extra 20 g
- Sal fina cantidad suficiente
- Pimienta negra cantidad suficiente
- para mantecar
- Ricotta salada 100 g
Preparación

Para preparar el orzotto con garbanzos, anchoas y ricotta salada, empezad poniendo al fuego una olla con abundante agua salada que os servirá para el caldo vegetal. Dedicaos luego a la limpieza de las anchoas, eliminando la cabeza con las puntas de los dedos 1 y las vísceras. Privadlas luego de la espina 2 y separad los filetes en dos partes 3.

Finalmente, dividid cada filete por la mitad 4, colocad los filetes limpios en una bandeja y reservad. Luego, cortad el chile y eliminad la parte verde; retirad las semillas internas 5 y cortadlo en tiras finas, luego picadlo finamente 6.

Ahora tomad el cebollino y quitadle la parte verde inferior y las eventuales partes verdes residuales 7. Luego, picadlo finamente 8. Laváis el perejil y el tomillo bajo agua corriente fresca; picad las hojas finamente 9, colocad el picado en un bol pequeño y reservad.

Pasad luego a la cocción de la cebada. Verted en una sartén antiadherente 20 g de aceite junto con el cebollino y el chile picados (reservad aproximadamente la mitad del picado, que os servirá posteriormente para la cocción de las anchoas) 10. Sofreíd ligeramente, mezclando con una cuchara de madera, hasta que el cebollino esté dorado. En este momento agregad también la cebada 11 y dejad tostar unos minutos, continuando a mezclar para que no se pegue al fondo. Luego, desglasead con el vino blanco 12.

Cuando el vino se haya evaporado, añadid un cucharón de caldo vegetal a la vez 13, esperando que el precedente se haya absorbido totalmente. Continuad mezclando la cebada para asegurar una cocción uniforme, finalmente añadid los garbanzos ya cocidos 14, ajustad de sal y pimienta 15, y continuad la cocción durante 20-25 minutos.

A pocos minutos del final de la cocción de la cebada, dedicad tiempo a la cocción de las anchoas. Ponéis al fuego una sartén antiadherente y verted el restante aceite de oliva, el picado de cebollino y de chile que habéis reservado 16; machacad un diente de ajo 17 y dejad dorar unos instantes. Luego, añadid las anchoas 18 y ajustad de sal y pimienta.

Agregad ahora la mitad del picado de perejil y tomillo 19 y continuad mezclando delicadamente para mantener íntegra la pulpa del pescado. Las anchoas tienen una cocción bastante breve: serán suficientes 1-2 minutos como máximo. Tan pronto como estén blancas, podréis apagar el fuego 20. Cuando la cebada esté lista, añadid el perejil picado 21,

luego rallad la ricotta 22. Añadid también las anchoas y mezclad delicadamente para amalgamar bien todos los ingredientes 23: vuestro orzotto con garbanzos, anchoas y ricotta salada está listo para ser degustado 24!