Tempura

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PRESENTACIÓN

La tempura es uno de los platos más conocidos y amados de la cocina del Sol Naciente, y uno de los más solicitados en los restaurantes de todo el mundo, se trata de una deliciosa mezcla de mariscos y verduras en tempura. Pocos saben que la receta en realidad tiene orígenes europeos, más precisamente portugueses, pero la maestría que caracteriza esta preparación es indiscutiblemente japonesa. La temperatura del agua, la adición de hielo, la consistencia desigual de la tempura y la ausencia de tiempos de reposo son solo algunas de las estrategias que permiten obtener una fritura ligera, aireada y al mismo tiempo crujiente. Al leer los consejos al final de la receta descubriréis el porqué de estos trucos, además de algunos más puestos en práctica por los cocineros más expertos... pero incluso si sois principiantes, no tendréis más que seguir nuestras indicaciones para servir una tempura de verduras y de mariscos para chuparse los dedos. Sin embargo, por una vez dejad de lado la salsa de soja: la tempura de hecho se acompaña tradicionalmente con una salsa agridulce especial llamada tentsuyu, junto con daikon y jengibre rallado. La salsa de soja será perfecta para acompañar otras especialidades de vuestro menú made in Japan, como sushi y gyoza!

¡No os perdáis también la receta de otro gran clásico de la cocina japonesa: el ramen!

INGREDIENTES

Ingredientes
Gambas 500 g - para limpiar
Zanahorias 100 g
Calabacines 100 g
para el rebozado
Agua con gas 300 g - helada
Harina de arroz 100 g
Harina 00 100 g
Hielo cantidad suficiente
para freír
Aceite de girasol cantidad suficiente

Preparación

Para realizar la tempura, primero asegurad que los ingredientes para la tempura estén bien fríos, así que poned el agua en el congelador hasta el momento en que debáis usarla (verificad que no se congele). Pasad a la preparación de las gambas: quitad suavemente la cabeza 1, las patas y el caparazón dejando solo la cola, luego sacad el hilo negro que se encuentra en el dorso ayudándoos con un palillo o con la punta de un cuchillo pequeño 2. Por último, aplanad ligeramente las gambas limpias usando un pequeño rodillo, para evitar que se curven durante la fritura 3; alternativamente, podéis hacer cortes diagonales poco profundos a lo largo del dorso.

Ahora ocupáos de las verduras: cortad y dividid los calabacines a la mitad 4, luego cortadlos en rodajas de pocos mm de grosor 5; si preferís, podéis hacer bastones. Proceded de la misma manera con las zanahorias 6.

En este punto, podéis preparar la tempura: verted la harina 00 y la de arroz en un bol 7, mezclad y transferid el bol a un recipiente más grande que habréis llenado con cubitos de hielo 8. Añadid el agua con gas helada y mezclad muy brevemente con un batidor o un tenedor 9: no deberéis obtener una mezcla lisa, sino grumosa.

Verted el aceite de semillas en un wok o en una sartén de bordes altos y llevadlo a una temperatura de 170°-180°. Si no tenéis un termómetro, podéis verificar la temperatura dejando caer una gota de tempura en el aceite: si se hunde hasta la mitad y luego sube rápidamente a la superficie, significa que el aceite está listo para freír. Sumergid las gambas en la tempura 10, dejando que escurra el exceso, luego sumergidlas en el aceite caliente 11 y freíd por 1-2 minutos. Para obtener un resultado más voluminoso, podéis tomar un poco de tempura con los dedos y dejarla caer directamente sobre las gambas para formar protuberancias crujientes. A medida que estén listas, sacad las gambas del aceite 12 y ponedlas sobre papel absorbente. La tempura no debe dorarse durante la fritura, sino que debe permanecer blanca.

Cubrid con tempura también las verduras y freídlas 13, teniendo cuidado de no añadir demasiadas piezas a la vez para evitar que baje la temperatura del aceite, luego escurrid sobre papel absorbente 14. Vuestra tempura está lista para ser servida simplemente con un poco de sal o acompañada con la salsa agridulce 15!

Conservación

Se recomienda consumir la tempura de inmediato para degustar toda su fragancia.

Consejo

El secreto para una excelente tempura está precisamente en obtener una mezcla con grumos. ¿Os parece extraño? El motivo es evitar que se desarrolle demasiado gluten, por eso se mezclan los ingredientes lo menos posible, tanto que algunos sugieren usar los palillos limitándose a dibujar ochos dentro del bol.

Otra garantía de éxito es el choque térmico que ocurre cuando los ingredientes fríos entran en contacto con el aceite caliente: por esta razón es muy importante mantener baja la temperatura de la mezcla, tanto que algunos incluso refrigeran la harina antes de usarla. Hablando de harina, podéis utilizar solo la de arroz si queréis realizar una tempura sin gluten.

En cuanto a los ingredientes para freír, no tenéis más que elegir: calabaza, berenjenas, boniatos, setas shiitake, cebollas, judías verdes, espárragos, pimientos... lo importante es que sean verduras de temporada porque cocinarán poco y mantendrán intacto su sabor. En lugar de las gambas, también podéis usar calamares, sepias o vieiras!

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.